Uno de los personajes del universo Marvel favoritos sin duda es Thor, el poderoso (y sensual) “Dios del Trueno”.

Pero cuando finalmente llegó la última entrega de la saga de los vengadores, vimos a un Thor descuidado, con sobrepeso y evidentes problemas emocionales luego de no haber podido eliminar a Thanos cuando tuvo la oportunidad.

Aunque esta es una película de ciencia ficción, convendría enfatizar el mensaje que puede dejar sobre un tema de #SaludMental que se ha convertido en una epidemia mundial: La depresión.

Independientemente de las críticas hacia el personaje o la producción de la película de los Avengers, puede ser un buen medio para difundir #MásInfoMenosEstigma y que la sociedad en general que cree que la depresión , ansiedad o los trastornos mentales no existen, pueda entender y ubicar algunos signos que puede tener una persona con un #episodiodepresivo y de esa forma seguir derribando los mitos como:

“Todo está en tu mente y tienes que echarle ganas”.
“Eso no existe, lo qué pasa es que no piensas positivo”.
“¿Y tú por qué te vas a sentir así si lo tienes todo?”.
“Hay personas que sufren más que tú”
“Yo también me he sentido así, he pasado cosas peores y no ando queriendo llamar la atención”.

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El Thor de Avengers Endgame ¿Cuáles son sus signos?

Tras una serie de eventos de lucha contra “Thanos”, la frustración y el sentirse incapaz de poder salvar a la humanidad, le lleva a cortarle la cabeza de forma impulsiva y con ira.

Aunque en el desarrollo de la historia de los vengadores, podemos notar cómo esa acción le genera profundos sentimientos de culpa, además del autocastigo de repetirse a sí mismo que no hizo lo correcto o no fue suficiente.

La depresión se deriva de una combinación de factores biológicos, psicológicos y sociales; es decir que existe la posibilidad de que la persona tenga una carga genética, pero además es de mucho peso el contexto en el que se ha desarrollado y algunos detonantes que pueden ocurrir en alguna etapa de su vida.

Al igual que Thor, una persona con depresión suele sentirse frustrada por no lograr cumplir con las expectativas que otros y ella misma tienen, le da coraje no poder realizar las cosas como antes las hacía.

Puede cometer acciones impulsivas o estallar en ira, un tanto porque se enoja consigo misma y otro tanto porque el enojo es la mejor forma de ocultar el dolor.

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Además en el transcurso suele tener problemas en sus relaciones de pareja , familiares y sociales, lo cual genera una sensación de ser insuficiente, de no ser buena persona y la idea que “todos serían más felices si no estuviera presente”.

Así como Thor, lo que hizo fue alejarse, aislarse, no salir de su casa durante un prolongado tiempo y se le encuentra con una imagen totalmente opuesta a la que siempre había tenido: estado de ánimo bajo, exceso de peso, falta de aseo, malos hábitos alimenticios, dependencia al alcohol y un notable dolor emocional.

Aunque sucede que aparentemente está pasando un buen rato con sus amigos y luce sonriente, esa es la trampa de la depresión. Esa es una de las posibles máscaras para ocultar el dolor, la sensación de desesperanza, la incapacidad de disfrutar lo que antes le gustaba, la complicación para interactuar con los demás o cuando se agrava la condición, las ideas de suicidio.

Las personas que sufren de depresión no siempre están llorando

Al vivir en una sociedad tan exigente y que no se permite mostrarse vulnerable, las personas con depresión comúnmente lo ocultan tras la máscara del “estoy bien”.

Escuchar y permitir que una persona exprese lo que está pasando en su vida, lo que siente o lo que piensa es la mejor estrategia para poder identificar si se está en un estado de depresión y atenderlo oportunamente.

Suponiendo que Thor de Avengers Endgame personifica a un dios con mucha fortaleza, con gran encanto, con una excelente posición, cualquiera podría pensar que lo tiene todo y no tendría ningún motivo para sentirse mal.

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Sin embargo, sucedió que aparece más bien un Thor humano, destruido ante la muerte de su madre, de su pueblo, de su amor y de sus amigos. Con la sensación de haber fallado, por lo que su autoestima cayó por los suelos y se refugió en la dependencia al alcohol para aminorar el dolor emocional y disfrazar lo que sentía.

Hay que comprender que la depresión no distingue entre género, raza o condición social, no se le puede decir a una persona que no tiene motivos para sentirse así, que lo tiene todo o compararle con alguien más, pues sólo cada quién sabe lo que está sintiendo en el interior y las situaciones impactan de distinta forma en cada persona.

Una gran acción para Thor, fue que sus amigos fueran a buscarle y aunque pareciera que no quería, lograron convencerle. De esa forma logró compartir con ellos, sentirse parte de algo, saber el aprecio que le tenían y darse cuenta que aunque su imagen física no era la de antes y su problema con el alcohol era muy evidente, sus amigos le dejaron expresarse y lo trataron con total aceptación.

Es por eso que es tan importante el apoyo de familiares, amigos y seres queridos, pues al mostrarse con actitud de apoyo y empatía, es más fácil que la persona pueda salir adelante y darse cuenta que hay personas a las que les importa.

Si tú o alguien que conoces se ha sentido con poca energía, sin esperanza, con ganas de llorar, sin poder dormir o dormir mucho, ha cambiado hábitos alimenticios entre no querer comer o darse atracones, ha tenido ideas de querer desaparecer, entre otras cosas.
Es importante acudir con un especialista de la salud mental para que pueda brindar un diagnóstico y tratamiento correcto.

La depresión, ansiedad y los trastornos mentales, no se ven, pero existen. Y requieren atención médica, psicológica y apoyo familiar/social.

Texto de: Iliana Romero M para #TLPMéxico.
#NoLeDigasÉchaleGanas
#CompartiendoExperiencias
#TodosLoPodemos

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Información generada por la redacción de la Revista Sentido de Mujer para la sección especializada en Salud Mental